Este encuentro trasciende lo turístico: es una inmersión genuina en las tradiciones andinas, donde los viajeros son recibidos como huéspedes honorables con coplas y cantos típicos que narran historias de la tierra, el amor y la vida en la Puna.
La experiencia se vive alrededor de la mesa, saboreando auténticos sabores ancestrales. La tradicional sopa majada —un plato reconfortante y lleno de historia— da paso a un exquisito asado de llama preparado al estilo campestre, con una cocción lenta que realza su sabor único. Los licores artesanales de hierbas andinas como la rica-rica y la muña-muña aportan notas aromáticas y digestivas, cerrando una degustación que es mucho más que una comida: es un ritual de conexión con la cultura local.
Los visitantes no solo observan, sino que participan activamente en celebraciones ancestrales. La ceremonia a la Pachamama (Madre Tierra) es un momento especialmente emotivo, donde se agradece por los frutos recibidos y se piden bendiciones para el camino, reforzando el vínculo entre el hombre, la tierra y el cosmos. Al finalizar, cada viajero recibe un obsequio de recuerdo, un símbolo tangible de la generosidad y el cariño de esta familia anfitriona que perdura mucho después de haber abandonado la altiplanicie.
Ubicación: 269 km desde S.S. de Jujuy, 58,2 Km desde Abra Pampa
Duración: 3 h.
Dificultad: –
Altitud aproximada: 3.600 m.s.n.m
Época recomendada: de marzo a noviembre, en época de lluvia los caminos pueden verse interrumpidos.